Transformar el modelo para responder a los retos

Vivimos una transformación sin precedentes en nuestro sistema productivo para hacer frente a la emergencia climática. Un momento crucial, que nos sitúa a las puertas de un cambio de paradigma en la economía española para los próximos 15 o 20 años. Hemos de afrontar el reto que supone recuperar la normalidad tras la pandemia, apoyándonos en un nuevo modelo verdaderamente sostenible. En este camino, nuestras infraestructuras van a tener un papel importante como contribuidoras a la transición ecológica y a la reconversión del modelo actual.

En Enagás estamos comprometidos con la descarbonización y por eso acabamos de anunciar en la actualización de nuestro plan estratégico 2021-2026 que adelantamos nuestro objetivo de neutralidad en carbono a 2040. Somos capaces de adelantar una década el objetivo que nos marcamos hace solo un año porque para conseguirlo tenemos un plan técnico muy riguroso y más de 50 proyectos de eficiencia energética, y porque partimos de todos los avances en reducción de emisiones que hemos hecho en los últimos años.

Además, diferentes equipos de la compañía están impulsando muchos y muy diversos proyectos para contribuir a alcanzar los objetivos de descarbonización españoles y europeos.

Uno de los grandes hitos en 2020, que destacamos en nuestra presentación de resultados, es que hemos puesto en operación una de las infraestructuras energéticas más relevantes de Europa de los últimos años, Trans Adriatic Pipeline (TAP). Han sido cuatro años y medio de construcción y ahora el gas natural ya está circulando con normalidad por la redes de nuestros socios Snam y Desfa en Italia y Grecia. TAP permitirá reforzar la seguridad en Europa, diversificando las fuentes energéticas, y avanzar en la descarbonización, y es una muestra más de nuestro compromiso internacional y voluntad de participar en proyectos europeos.

Otro ejemplo es el proyecto LNGas hive, liderado por Puertos del Estado y coordinado por Enagás, con el que contribuimos a impulsar el GNL como combustible alternativo en los mares y avanzar en la reducción de emisiones. Esto es imprescindible para hacer más sostenible un sector como el del transporte, que a través de todas sus modalidades representa el 28% de la demanda de energía mundial y el 23% de las emisiones de CO₂. Conscientes de que la sostenibilidad se inicia en el mar, estamos impulsando el bunkering, en coordinación con Puertos del Estado, con dos desarrollos específicos en Algeciras y Barcelona respaldados por la Unión Europea.

La innovación es otra vía a través de la que estamos contribuyendo a la transición energética: una muestra ha sido la puesta en marcha, en enero, de la primera hidrogenera de España para vehículos eléctricos de pila de combustible de gran autonomía. Se trata de un proyecto pionero, junto a Toyota y otros socios, para potenciar el uso del hidrógeno como combustible limpio y sostenible.

También nuestro programa Ingenia Energy Challenge promueve la innovación como palanca para afrontar el reto de la descarbonización. Las soluciones propuestas por los ganadores de esta iniciativa, ADDENA y Orchestra Scientific, son buena prueba de la visión de Enagás de convertir al sector energético en punta de lanza para contribuir a un mundo más sostenible.