TOP

El canto solidario de María Junco


Equipo EnagásMás allá de Enagás

El canto solidario de María Junco

La afición de María por el canto y la música se inició a temprana edad, siguiendo el ejemplo de sus padres y abuelos, quienes le inculcaron el cariño por ambas prácticas. María, Directora de Análisis y Desarrollo en la Dirección General de Gestión Técnica del Sistema, ha crecido con diversas influencias musicales, desde la polifonía renacentista hasta la música de los años 70 pero ahora se decanta por el swing, el folk, el country y el rock. Su amor por la música le ha ayudado a canalizar su lado más solidario, colaborando con la Fundación Diversitas, que apoya a aquellas personas o familias en situación de vulnerabilidad o en riesgo de exclusión, y con la que organiza conciertos de distinta envergadura en la Comunidad de Madrid.

1. ¿Cómo te iniciaste en esta afición musical?

En mi familia siempre ha habido mucha tradición musical, de modo amateur, por lo que es una afición a la que estoy vinculada desde que era muy pequeña. Mi abuelo, aunque no llegué a conocerlo, cantaba zarzuela, y mi abuela tocaba el piano, pero, sin duda, mis grandes referentes desde siempre fueron mis padres. Ambos cantan y han cantado en diversos coros. Además, mi madre toca la guitarra y mi padre el piano, así que, imagino que no me quedaba opción que también seguir sus pasos.

María colabora con la Fundación Diversitas para organizar conciertos de diversa índole

2. ¿Qué género musical te gusta más y cuál te gustaría explorar?

En el ámbito musical soy muy ecléctica. La polifonía me encanta, especialmente renacentista -que tuvo una gran escuela española- y también la barroca. También me gusta la música de los años 70, pero he tenido épocas más intimistas, en las que el género de cantautor era mi favorito. Actualmente me decanto más por el swing, el folk y el country y desde hace unos meses estoy explorando el rock. Quizás es un torpe intento por sentirme más joven (y digo torpe porque mis hijos me dicen que el rock es de viejos). Acudo a RockinMad, una Escuela de Rock, y, como diría Loquillo, ahora “tengo una banda de Rock&Roll” en la que todas somos mujeres de edades similares y nos lo pasamos fenomenal. Para mí este género es todo un reto a nivel técnico porque necesito desaprender la “pureza” y “limpieza” del sonido lírico, para encontrar un registro más rasgado y relajado. Me gustaría explorar también la composición, pero me temo que crear música requiere de dos ingredientes de los que carezco: tiempo y sosiego.

3. ¿Cómo pasas de cantar en un cuarteto lírico y en varios coros a adentrarte en la música folk y country?

En mi época universitaria canté en el coro Microcosmos, de la Universidad Complutense, y participaba en un cuarteto renacentista con el que cantaba principalmente en bodas y eventos. Esa época fue muy especial. En la música coral es muy importante el trabajo en equipo, las voces individualmente no brillan si no son acompañadas de otras, que es cuando crean resonancia y magia. El folk y el country llegaron más tarde, tras un parón de algunos años, y de la mano de un grupo de sanitarios que procedían del Coro del Hospital de La Paz. Cantar en un grupo de este estilo requiere de otras habilidades, no sólo técnicas, sino de escucha, hay que saber entender la diversidad de cada uno de los elementos (instrumentos, voces, coreografía, puesta en escena,…), que no siguen un patrón común, pero se necesitan y complementan.

“Creo que es importante buscar pequeños huecos, porque el arte es un refugio de nuestra labor diaria y un espacio para cultivar las emociones"

4. ¿Qué referentes musicales tienes? ¿A qué cantantes admiras?

Siempre he estado muy marcada por los gustos musicales de mis padres, así que mis referentes son muy sesenteros: The Beatles, The Rolling Stones, Creedence, The Mama`s & The Papa´s,… ¡Ah! Y la música sudamericana. Actualmente tengo muy presentes a Chris Stapleton, Lady Antebellum y The Cranberries.

En relación a cantantes, mis musas son esas voces femeninas graves y profundas, como Nina Simone, Patti Smith o, en castellano, María Dolores Pradera y Mercedes Sosa. Respecto a voces masculinas estoy últimamente encandilada por la voz del cantante de Arde Bogotá, que me parece muy singular.

5. Al margen del canto, ¿sabes tocar algún instrumento musical?

Cuando tenía ocho años me regalaron mi primera guitarra y, desde entonces, las guitarras se han convertido en mi pequeño capricho. Aunque prácticamente fui autodidacta, he recibido algunas clases y también las he impartido yo a niños en un par de colegios. Hace unas semanas he empezado con el piano, veremos a ver si consigo sacar tiempo y disciplina para avanzar algo…

María con su banda de Rock&Roll

6. Cuéntanos un poco más acerca de la fundación en la que participas y que organiza conciertos. ¿Qué objetivos tiene?

Se trata de la Fundación Diversitas, que tiene como objetivo apoyar a aquellas personas o familias en situación de vulnerabilidad o en riesgo de exclusión a superar sus dificultades. Organizamos uno o dos conciertos grandes al año, y luego pequeños acústicos en salas emblemáticas de Madrid. La verdad es que en los últimos años he logrado unir mi pasión por la música con causas sociales que me motivan. Hace un par de años organicé un pequeño festival de rock benéfico para recaudar fondos contra el matrimonio infantil y la mutilación genital femenina con la ONG Mundo Cooperante, y durante un tiempo canté en un coro femenino contemporáneo, Noialtre, que busca dar visibilidad a la mujer en el mundo de la música.

Sin duda, el hecho de organizar conciertos benéficos es un reclamo para el público que, de otro modo, sería más complicado que viniera a escucharnos.

7. ¿Cómo compaginas tu afición con el día a día?

Creo que es importante buscar pequeños huecos, porque el arte es un refugio de nuestra labor diaria y un espacio para cultivar las emociones. De hecho, conozco a muchos “artistas” escondidos detrás de los profesionales de la energía (escritores, diseñadores, pintores,…). Aun así, me cuesta encontrar huecos, así que suelo hacerlo los fines de semana y los jueves por las tardes/noches (quizás por eso recurro al rock, que es muy “nocturno”). Desde luego, no podría hacerlo sin mi familia, que no sólo me apoya, sino que a menudo me acompaña.

María, en plena actuación
1/1 - (26 votos)